sábado, 20 de agosto de 2011

Solo para ti... =)

La verdad, es que sé que no podré escribir nada que no sepas ya, así que intentaré presionar a mi querida musa para poder crear algo con lo que me puedas sentir cerca de ti cuando te vayas...

Había una vez una niña llamada Irene. Era desconfiada a más no poder, y sólo tenía una amiga.
Poco a poco, gracias a algunos niños de su clase, la pequeña Irene fue abriendose más y consiguió sentirse a gusto.

Al llegar al instituto, tras pasar juntos de niños a adolescentes, algunos lazos se rompieron, otros siguieron igual y otros... Se hicieron mucho más fuertes. De estos últimos, hubo uno especial: el caso de Irene y Nati, la loca del grupo. Durante mucho tiempo pasaron mil cosas juntas, buenos y malos momentos, confesiones y secretos, épocas oscuras y nuevas experiencias... Nati fue y sigue siendo sin discusión, la mejor amiga de la salvajita Irene.

Ya en la universidad, tras tantos momentos juntas y otros tantos años como compañeras de clase, tienen que separarse, y sin embargo, ambas saben que en el fondo siempre seguirán juntas. Porque a pesar de que Nati se vaya, parte del corazón de Irene se va con ella, para apoyarla y ayudarla cuando más la necesite a pesar de la distancia; porque, aunque aún no se ha ido, ya la echa de menos; porque siempre será su mejor amiga y porque, pase lo que pase, siempre la querrá más que a su vida.

"No es más grande quien más espacio ocupa, si no quien más vacío deja cuando se va...". La verdad es que dejarás un vacío enorme, y por eso, eres tan grande.
Gracias por todos los momentos en los que me has apoyado, gracias por hacerme crecer como persona, gracias por no dejarme cometer algunas locuras, gracias por enseñarme que a pesar de los problemas siempre hay un lado positivo con el que iluminar mi cara con una sonrisa, gracias por haber sido una persona en quien confiar, y gracias por confiar en mí... Gracias por darme valor y fuerza cuando yo solo veía el mundo de color negro. No podré agradecerte todo lo que has hecho por mi aunque siga escribiendo, por eso solo puedo decir, en general, GRACIAS.
Espero, de verdad, que con esta pequeña "cartita" me tengas cerca de cuando estés allá. Te quiero.

Always yours... Tu pequeña Irene.


martes, 9 de agosto de 2011

lunes, 8 de agosto de 2011

Comencemos una partida en el juego del amor...

Tira el dado y mueve ficha,
mueve un alfíl o un peón.
No importa lo que hagas,
mientras juegues en el tablero de mi corazón.

¿Qué me dices? ¿Te apuntas?
No es difícil apostar...
pero, a pesar de todo, a veces toca llorar.

Juega con tu mazo,
saca una carta al azar,
derriba mis defensas y dejemos de jugar.

Ahora bésame,
tu rey ha llegado a mi reina,
pronuncia el "jaque mate" y llevate a tu princesa...

Decide tu recompensa por esta arriesgada partida,
elige entre mi corazón...
o una amarga despedida.


viernes, 20 de mayo de 2011

Lucidez

El único momento
de lucidez que he tenido últimamente, me ha hecho ver la realidad de mi mundo, me ha hecho despertar de una especie de sueño donde los sucesos que ocurren en el planeta no eran más que algo secundario a los amigos, internet, los libros, la música...

El único momento de lucidez que he tenido últimamente me ha mostrado que la existencia del ser humano se basa en una especie de cadenas tróficas sociales: el más fuerte se zampa al más débil, compartiendo los restos con demás carroñeros de su condición.
Un buen ejemplo sería como las grandes empresas van eliminando cada vez más a las pequeñas empresas, y de este gran festín, el gobierno se lleva algunos de los restos cadavéricos de las víctimas. ¿Que hay de ese pequeño quiosco, esa tienda conocida por todos los del barrio, que se encuentra en la mayoría de los casos, escondida en una callejuela? ¿Acaso podrá sobrevivir en la jungla que es nuestra sociedad, o sucumbirá ante la presencia de los gigantes económicos? ...¡Ya basta!

El único momento de lucidez que he tenido últimamente me ha mostrado la corrupción de los políticos, como se aprovechan de las necesidades de los ciudadanos de su país, cómo las falsas promesas terminan, tras cada mitin, formando parte de una montaña de papeles hechos bolitas y tirados a la basura, en los que se han escrito mil mentiras más.
También me ha mostrado como caemos, una y otra vez, en una red de mentiras trazada con cuidado por los gobernantes que se han ido colocando en el poder gracias a los votos que han dado los propios cuidadanos, que no solo han metido un sobre en una urna, han depositado su confianza en ese pequeño trozo de papel. Menos mal que, gracias a casualidades de la vida, o simplemente a la increíble torpeza de estos señores, estas verdaderas estafas políticas son descubiertas por el pobre y engañado pueblo que ha elegido a ese montón, y puedo escribirlo sin tapujos y con mayúsculas, de SINVERGÜENZAS... ¡Ya basta!

El único momento de lucidez que he tenido últimamente me ha enseñado como, mientras yo tranquilamente como y duermo en una cómoda casa, hay millones de personas muriendo de frío, hambre u otro tipo de miserias. ¿Podéis manteneros impasibles sabiendo esto, sin contribuir a ninguna causa? Yo, definitivamente no. ¿Podéis aguantar saber que las grandes multinacionales se aprovechan de los países con más necesidades, explotándolos sin tregua? ¿O como los países desarrollados se pelean por los recursos de estos países, aprovechandose y comiendo como verdaderos gorrinos del único plato de donde estos lugares menos desarrollados podrían sacar algo de provecho? Por desgracia, cuando estos no se lo llevan, el dinero va en su mayoría al bolsillo de algún maharajá ricachón frío como un témpano de hielo, que sabe que su pueblo muere ante sus ojos y sin embargo prefiere comprarse yates del tamaño de un trasatlántico o gastar su riqueza en mantener a su harén de 13622 mujeres... ¡Ya basta!

A veces me pregunto, ¿somos nosotros los desarrollados, cuando en realidad los grandes avances no pueden tapar el increíble retroceso ético y moral de nuestras avanzadas sociedades y, sobre todo, de nuestros "queridos" gobernantes? En mi humilde opinión, nos encontramos a años luz de los habitantes de estos países en lo que a solidaridad y felicidad se refiere, pues con una milésima parte de lo que tenemos, ellos son a su vez mil veces más felices que nosotros. Por todo ello... ¡Ya basta!

El único momento de lucidez que he tenido últimamente me ha dado, y sobrado, para despertar del letargo en que la mayoría de la sociedad vive, sabiendo sin saber que el mundo se va a pique, viendolo en la televisión un día tras otro y aún así imaginando que los informativos son algo parecido a una película... Pues no, señores, señoras, jóvenes caballeros y bellas señoritas: ésta es la realidad de vuestro mundo, de mi mundo... Es la realidad y punto.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Estaba harta...


¿Os habéis sentido alguna vez idiotas por tropezar una y otra vez con la misma piedra? Si habéis asentido al leer mi pregunta, seguramente habéis sentido en vuestras propias carnes la frustración que producen ese tipo de situaciones. Debido a esto, escribí un pequeño poema en un momento en el que solo pretendía alejar de mí los pensamientos, zumbones como mosquitos, que me rondaban la cabeza en aquel momento. Se puede decir que este poema me salió del alma y del corazón, y al escribirlo sentí un gran desahogo (siento el lenguaje que puede mostrar, y quiero decir que esto se refiere solo a unas cuantas personas, no quiero generalizar con todo el género masculino).


Solo quería decirte que San Valentín no existe,
que Romeo y Julieta no eran de este planeta...
No te hagas ilusiones,
en el amor el que gana es el que jode,
el que sabe que sientes pero ni se arrepiente
de decirte mil te quieros,
vacíos de sentimientos verdaderos.

Solo quieren alegrarse, pasar el rato, desquitarse,
¡quitarse el polvo de las partes!
Y para ello los corazones son basura, tropezones,
solo obstáculos que evadir
para llegar a lo único que quieren conseguir.

Cuatro cerdos, cuatro idiotas,
cuatro imbéciles que me agotan...
¡Ya estoy harta de mentiras!
¡A la tercera no va la vencida!
Son todos iguales, una manada de subnormales.

Desesperación

Escribí este microrelato hace poco tiempo, para un concurso. He descubierto que esta historia suscita algo parecido al amor/odio en las personas que la han leído, puede gustar mucho su estilo recargado y barroco, o no gustar tanto debido a lo mismo. Veremos que os parece ^^

Las oscuras siluetas me observan con ojos recelosos.
Yo, indefensa, intento escapar, pero estas se van agolpando a mi alrededor, cerrandome el paso, impidiendo mi huída hacia las puertas del paraíso. Y me atrapan. Me debato entre la cantidad de manos que me agarran, que desgarran mis vestimentas... que me arrastran hacia las profundidades mientras comienzo a notar el ardiente calor del mismísimo fuego del infierno.

Despierto. Me froto los ojos intentando distinguir algo entre la espesa oscuridad que me rodea, algo que me ayude a descubrir que debo hacer, que hago en un lugar como este.
Pero empiezan las visiones de los recuerdos olvidados, y los fantasmas del pasado se convierten en espectros del presente que me torturan enfrascando mi mente en un bucle de sentimientos agridulces. Ahora... lo recuerdo todo. Esta es mi historia.

Los días pasaban lentos, dejando cada uno de ellos una huella indeleble en mi razón... Y en mi piel. El reloj de la clase martilleaba en mis oídos con cada paso del segundero, cada instante en el que deseaba fervientemente que el tiempo se detuviera, que el timbre no sonara.
Por desgracia esto nunca ocurrió. Las horas pasaban raudas y se acercaba el momento que causaba mi terror. El doloroso aullido de la campana del final me confirmó que ya no había escapatoria.
Salí al aparcamiento temblorosa, ocultando las marcadas ojeras con una cortina de largo y liso pelo azabache, casi corriendo hacia un desesperado atisbo de ínfima esperanza. Pero llegaron...como todos los días. Comenzaron a golpear cada centímetro de mi cuerpo mientras sus despectivas risas y sus insultos apagaban mi llanto, y sus móviles grababan la que me pareció otra interminable marea de confusión y dolor.
Después de escupirme y tirarme la mochila a la basura se fueron, dejandome tendida sobre el frío asfalto. Entonces algo estalló en mi interior, un sentimiento indescriptible que me hizo tomar por fin una decisión: "Nunca más... No volverá a pasar...".

Al día siguiente preparé todo lo necesario y me dirigí al instituto, pero esta vez mi pelo se encontraba recogido en una firme cola de caballo. La determinación que mostraba mi cara disimulaba las ojeras, la rabia me dio una seguridad en mi misma y un aire de superioridad totalmente inusitados en mí, y los golpes, imposibles de tapar, atraían la mirada de las personas con la que me topaba.
Me metí en el baño y saqué un bote de spray, con el que escribí en el espejo en grandes letras rojas: "La injusticia arderá en un lugar al que irá acompañada por vosotros y por mí".
Poco después caían de mis manos la Magnum ya descargada de mi padre, mientras el bate de béisbol ya astillado por los golpes reposaba sobre un pequeño charco rojo.
Ausente, subí a la azotea y me sentí libre mientras el viento agitaba mi cabello y cerraba los ojos antes del impacto...
Las oscuras siluetas me miran con ojos recelosos, yo sonrió y les doy la mano. Y estas me sueltan, dejan libres mis vestimentas mientras nos dirigimos hacia el cálido lugar que yo misma elegí, al eterno hogar en el que morará mi Alma. Para siempre.

Y para muestra... Un botón.

Buenas a todos los que se aventuren a leer este blog :)

Mi nombre es Irene, una chica de Gran Canaria a la que escribir le produce una agradable sensación.Debido a esto, he decidido crear este pequeño espacio, donde mostrar algunas de mis creaciones.

La verdad, es que espero que os guste, espero que podáis disfrutar de algunas de las pequeñas historias que iré escribiendo a medida que mi musa se esfuerce en darme nuevas ideas ^^ ¡Esperemos que no decida tomarse muchos periodos vacacionales!.

Saludos, Ire.